Así que después de abrirles las puertas y dejarles su propio camerino, aparecieron en clase...¡dos payasetas!!!. La cara de sorprendidos de todos nosotros, auguraba...¡una tarde muy especial!
La actuación comenzó con el cuento de la ratita presumida. La narración corrió a cargo de Vicki (aunque después hicimos que Isabel también la repitiera). Candela adquirió con mucha soltura el papel de la ratita presumida y Diego iba convirtiéndose en todos los pretedientes de la ratita, hasta que el gatito...¡se comió la ratita!.
Genial la interpretación, las ganas y la ilusión de los cuatro participantes en el cuento.
Despues Isabel, nos contó el cuento de "La liebre y el petirrojo" un cuento precioso sobre la amistad de dos animales.
Después hicieron un baile muy divertido. Esta vez Candela y Diego se transformaron en verdaderas marionetas...¡ Vicki e Isabel les movian con unas cuerdas a su antojo!!Todo esto al ritmo de la canción "Polichinela" de Sara Montiel. Como no podía ser de otra manera, despedimos este número con muchos aplausos e incluso algun@ quiso convertirse también en marioneta...¡nos encanto!!
Y entonces Candela dijo...¡nos hemos olvidado una cosa!!y al preguntarle qué, nos contó que hubieran querido hacer espectáculo con jurado como en el programa de La Voz.Así que como en todo buen espectáculo, la improvisación puede tener su importancia, lo estábamos pasando tan bien y el reloj nos decía que aun teníamos tiempo para disfrutar...¡nos lanzamos a hacerlo!!
Esta vez queríamos sorprender nosotr@s a Vicki e Isabel. Escogimos jurado, canciones emocionantes ( en este caso " No importa que llueva" y "Vivir la vida") y nos lanzamos a cantar y a divertirnos.
¡Que divertido!!
La verdad es que fue una actuación increible ( hicimos repetir el cuento, porque estábamos atentos y con muchas ganas de seguir). Isabel y Viki me contarón después que habían disfrutado mucho y yo les puedo prometer que ese entusiasmo nos lo transmitieron a nosotros. Fue una tarde especial con una despedida muy especial, y es que hay veces que pequeños gestos se convierten en momentos de esos que se quedan grabados. Y así me lo pareció a mi, cuando Candela y Diego cogieron la poesía escrita por sus mamás y nos la dedicaron a todos nosotros. Me gustaría dedicarle un espacio especial a esta poesia, porque estoy segura de que voy a encontrar su huequito en este blog para ella.
Muchisimas gracias Vicki e Isabel por vuestra compañia, vuestras ganas y por transmitirnos tanta ilusión y emoción. Para nosotros ha sido un placer compartir esta tarde con vosotras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario